Mañana jueves 1 de
septiembre la nación escribe un nuevo capítulo de su lucha por la democracia,
la ciudadanía abrumadoramente desea un cambio de rumbo, el gobierno se
encuentra perdido en su propio laberinto sin poder conectarse con la realidad
existente. Se apuesta a que la jornada denominada “La Toma de Caracas” sea
pacífica y cívica, esto en contra de una minoría que parece hacerle juego a la
confrontación y la violencia.

