Llegamos
a tres semanas de cuarentena, todavía no está claro cuando termina esta
situación. Ya se da como un hecho que el año escolar finalizará vía online, aun
cuando tenemos la peor conexión de internet del continente.
Hoy
en Venezuela se hace menester buscar alternativas, sobre todo reales, para que
millones de ciudadanos no sufran las consecuencias de una larga cuarentena, así
como lo que se espera posterior a la pandemia. Ya la CEPAL y el FMI pronostican
una recesión, mucho más fuerte que la del 2008, como efecto de la paralización
que deja el COVID-19.